Una forma sencilla de acertar con el color es combinar tonos similares dentro de una misma paleta, colocados en vertical. Esta disposición crea una transición suave y equilibrada, ideal si buscas una atmósfera coherente y sin estridencias.

Por ejemplo, dentro de la paleta Neutros Atemporales de Bruguer Elegance, puedes combinar un Blanco Piedra, Marrón Beige y un Marrón tierra. Aplicar el tono más oscuro en una pared focal y los más claros en el resto ayuda a dar profundidad sin sobrecargar el espacio.

Esta técnica es perfecta para quienes quieren resultados elegantes sin complicarse: una forma intuitiva de crear armonía visual en cualquier estancia.

Si buscas un resultado más vibrante, prueba a combinar los colores que están alineados horizontalmente dentro de una misma paleta de Bruguer Elegance. Esta técnica potencia el contraste entre tonos complementarios, creando espacios con más carácter y dinamismo.

Por ejemplo, en la paleta Legado Sofisticado, mezclar Camel Clásico y Verde Oliva puede transformar por completo una estancia, aportando una riqueza visual que se siente equilibrada y sofisticada.

Una forma sencilla de aportar profundidad y energía a tu hogar, jugando con combinaciones que ya han sido pensadas para funcionar juntas.

Cada paleta de color de Bruguer Elegance incluye un tono neutro especialmente seleccionado para servir como base cromática. Este tono es el punto de partida perfecto para construir combinaciones armónicas con el resto de colores de la paleta.

¿Un ejemplo? En la paleta Naturaleza Serena, puedes partir del Blanco Nube y combinarlo con dos tonos secundarios, como un Verde Salvia y un Blanco Niebla. El resultado es un ambiente sereno y lleno de equilibrio, ideal para espacios que invitan a la calma.

Una fórmula fácil de aplicar que garantiza armonía visual sin esfuerzo, incluso si no tienes experiencia en decoración.

Las paletas de color de Bruguer Elegance están diseñadas para que todos sus tonos funcionen en armonía. Eso significa que también puedes combinarlos libremente, sin seguir un orden vertical u horizontal. Solo necesitas tener en cuenta una regla básica del interiorismo: no utilizar más de tres colores principales en un mismo espacio.

Por ejemplo, con la paleta Pop Moderno, puedes jugar con Rosa Boho,  Amarillo Destello   y Rojo Amapola. Usa el tono más intenso para destacar una pared o un rincón especial, mientras que los otros dos crean el equilibrio necesario. Esta forma de combinar aporta dinamismo, personalidad y un toque atrevido a cualquier estancia.